Fernando Peralta, Presidente de la Confederación de Canalistas de Chile

Claro, directo y con muchas soluciones. Comenzó su charla en la asamblea de la Asociación de Agricultores de las provincias de Quillota y Marga Marga con una idea, comentar las modificaciones al Código de Aguas, pero terminó respondiendo muchas inquietudes “ustedes me dicen cuando terminamos porque puedo estar hasta las 3 de la mañana hablando de agua”.

Así es el Presidente de la Confederación de Canalistas de Chile, el ingeniero hidráulico, Fernando Peralta Toro. Casado con española se ha sacado fotos hasta con el Rey de España. En la charla, se sentó de pierna cruzada y comenzó su alocución sobre el agua. No pudo pasar a la siguiente página, su presentación quedó en el título. Todos los regantes saben quién es Peralta y lo abordaron con preguntas sobre la sequía y las maneras de solucionar esta real catástrofe que tiene a los agricultores a las puertas de perder cosechas y sus inversiones.

Después de escuchar las preguntas, sorprendió su respuesta: “En el valle del Aconcagua estamos en una sequía con los pies en el agua”, las miradas atónitas de los regantes tuvieron explicación, el valle tiene un acuífero de 10 mil millones de metros cúbicos de agua proveniente de las filtraciones de los regadíos, del río Aconcagua y de napas subterráneas.

La cantidad de agua que tiene el acuífero del valle llenaría 170 veces el embalse Los Aromos, y acabaría rápidamente con la escasez hídrica en la región, pero es agua que los regantes no pueden usar. Según el gerente de la Junta de Vigilancia de la Tercera Sección del Río Aconcagua, Santiago Matta, sí se usa pero no como se debiera “necesitamos tener comunidades de aguas subterráneas, y en ese proceso está la Junta de Vigilancia”.

Usar el acuífero es algo complejo explica Peralta “todos miramos hacia la superficie y buscamos embalses superficiales pero se nos olvida lo que hay debajo, el valle tiene un embalse natural que está para usarlo, pero se necesitan los derechos de aprovechamiento de aguas subterráneas y la manera de hacerlo es a través de las comunidades de aguas, algo que no es nuevo pero en Chile no se usa”

Explica que el acuífero es una reserva que tienen los usuarios de agua y es regulada por la Dirección General de Aguas (DGA) que es el ente que otorga los permisos para su extracción “El acuífero es como un banco donde colocamos parte de nuestro dinero, si se acaba esta reserva nos quedamos sin agua y ese es el miedo que tiene la DGA porque ya pasó en una parte del río Copiapó y no quieren repetir esta situación. Pero se necesita voluntad política y ponerse de acuerdo para acabar con esta sequía, el agua está ahí” afirmó el ingeniero.

Matta, señala que si como Junta de Vigilancia hubiesen creado las comunidades de aguas antes de la sequía, no estarían pasando por los problemas actuales: “La reserva de agua que hay en el acuífero es muy importante, si contáramos con las comunidades de aguas subterráneas podríamos administrar de manera eficiente este recurso y podríamos palear de manera efectiva la sequía. Nos afectaría, sí, pero en menor grado”

Por ahora, la Junta de Vigilancia de la Tercera Sección ya cuenta con el estudio presentado por Aquasys, saben cuántos de sus asociados cuentan con derechos de aprovechamiento de agua, y quieren ser pioneros en la concreción de comunidades de aguas subterráneas “al tener estas comunidades no pasaremos por esta grave situación hídrica. El agua está, falta concretar la constitución de las comunidades un proceso engorroso que puede demorarse cuatro años” puntualizó.